14 actividades de implicación de los empleados para reavivar el entusiasmo
Pruébalas y prepárate para un chute instantáneo de moral
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Saluda al equipo A. En el trabajo bordan todo lo que hacen. Los proyectos los dejan niquelados, cumplen con creces con los plazos y llegan a los objetivos que se plantean. Y lo mejor de todo es que disfrutan colaborando. Están comprometidos con su trabajo y los resultados hablan por sí solos.
Saludemos ahora al equipo B. Aguantan a duras penas con el agua al cuello. Siempre echan más horas que un reloj (a menudo infructuosamente) para sacar adelante sus tareas diarias, y apenas tienen clara la importancia de su trabajo. Su entusiasmo ha desaparecido y todos los días les parecen un rollo.
Hay enormes diferencias entre ambos equipos, pero la mayoría de sus problemas pueden reducirse a la implicación de los empleados. Los empleados implicados aportan un montón de ventajas, entre las que se incluyen una mayor satisfacción de los empleados, un aumento de su felicidad, un incremento de la productividad y una menor rotación de personal.
Hemos compartido una serie de iniciativas a largo plazo que dan un fuerte impulso a los niveles de implicación, pero si lo que buscas son estrategias que tengan un efecto más inmediato, hemos dedicado esta página a unas cuantas actividades útiles que puedes poner en práctica desde ya. Dales una oportunidad y acércate un paso más a las vibraciones del equipo A.
Inspira la creación de vínculos en el equipo
1. Inicia un día de voluntariado en equipo
Los empleados se preocupan profundamente por servir a sus comunidades y por apoyar las causas que les apasionan con su trabajo.
En una encuesta de America’s Charities, el 71 % de los empleados afirmó que es imprescindible o muy importante trabajar en un lugar en el que el ambiente corporativo apoye las donaciones y el voluntariado. Además, el 82 % de las empresas afirman que los empleados quieren tener la oportunidad de colaborar como voluntarios con sus compañeros en un evento respaldado por la empresa.
Los empleados implicados aportan un montón de ventajas, entre las que se incluyen una mayor satisfacción de los empleados, un aumento de su felicidad, un incremento de la productividad y una menor rotación de personal.
Darle oportunidades a tu equipo para que colabore en beneficio de la sociedad no solo es bueno para tu comunidad, sino también para tu empresa. Estas actividades de voluntariado generan compañerismo y les infunde a tus empleados un mayor sentido de propósito.
Además, son relativamente fáciles de organizar y ofrecen una enorme flexibilidad para encontrar lo que te funciona. ¿Quieres hacerlas cada mes? ¿Cada tres meses? ¿Cada año? ¿Vas a elegir una causa para toda la empresa? ¿O puede el personal agruparse por equipos y elegir sus propias iniciativas? Las posibilidades son ilimitadas, sobre todo si organizas el evento de tal manera que se adapte a los intereses y horarios de tu equipo.
2. Implementa blogs internos
En el trabajo es fácil que la comunicación se acabe limitando estrictamente a temas de la empresa. ¿Cuándo podrás tener entre tus manos los activos de apoyo que necesitas? ¿Quién se ha acabado el tarro de café y no lo ha repuesto? Las conversaciones personales y la charla amistosa tienden a dejarse de lado en favor de otras cuestiones más apremiantes.
Aquí es donde intervienen los blogs internos, ya que ofrecen a tus empleados la oportunidad de compartir otros temas que les interesan, ya se trate de consejos de viaje a partir de sus últimas vacaciones o un atisbo del apasionante proyecto personal en el que están trabajando.
Esto no solo expone a tu equipo a ideas e intereses personales que de otro modo se habrían perdido, sino que también aumenta su sentimiento de conexión. En un momento en el que, según un reciente estudio, el 40 % de los empleados se sienten aislados en el trabajo, esa oportunidad para la creación de vínculos tiene un valor incalculable.
3. Promueve las pausas breves
No hace falta que te digamos que el agotamiento es un problema generalizado en los lugares de trabajo modernos. Todos estamos estresados al máximo, pero dudamos a la hora de tomarnos un descanso. De los trabajadores norteamericanos, el 20 % admite que le preocupa que hacer una pausa todos los días para comer haga que su jefe piense que no se están esforzando.
Aparte del sentimiento de culpa o de miedo a que les cuelguen el sambenito de gandules, las pausas frecuentes se han ligado a un aumento de la productividad, a una mejora del bienestar mental y a un incremento de la implicación. Según la misma encuesta anterior, el 81 % de los empleados que paran a diario para comer desean con vehemencia ser miembros activos de la empresa.
Con solo decirle a tu equipo que se levante del escritorio no llegarás muy lejos, sino que tienes que predicar con el ejemplo. Haz una breve pausa para comer todos los días o, cuando no sean horas de comer, invita a unos cuantos miembros del equipo a dar un breve paseo, a tomar un café o incluso a participar en un concurso de flexiones en el vestíbulo. Haz lo que haga falta para conseguir que el personal se despegue de sus escritorios.
El 37 % de las reuniones no parecen aportar ningún valor a la organización.
4. Planifica un evento social
¿Se han convertido los miembros de tu equipo en unos aburridos que no hacen más que trabajar? Si ya ha pasado un tiempo desde la última vez que os juntasteis para divertiros socializando fuera de la oficina, programa alguna actividad en el calendario.
Puede ser algo tan sencillo como una hora feliz o algo más estructurado como una clase de cocina o una visita turística. El objetivo es darle a tu equipo la oportunidad de conectar en persona y disfrutar de algo divertido juntos.
Y piénsatelo bien antes de que se te ocurra que los miembros de tu equipo preferirían estar bien lejos los unos de los otros al acabar la jornada. Según un estudio, la mayoría de los empleados se inclinaron por actividades frecuentes que crearan lazos en el equipo, el 31,4 % prefirió actividades trimestrales y, el 36,5 %, actividades mensuales.
Además, fomentar estos lazos puede promover la implicación. Los estudios de Gallup han demostrado reiteradamente la existencia de un vínculo concreto entre tener un mejor amigo en el trabajo y la cantidad de esfuerzo que los empleados vuelcan en sus quehaceres laborales.
5. Empieza con una tradición significativa
No te hace falta salir de la oficina para darles a tus empleados algo que esperar. Prueba a iniciar una tradición en la oficina que pueda crear recuerdos, fomentar la implicación y afianzar las relaciones.
Una opción podría ser organizar un evento de elaboración de copas heladas el último viernes de cada mes. O tal vez que todos llevéis comodísimas alpargatas en la oficina todos los lunes. O quizá incluso establecer la tradición de que una vez al mes todo el mundo lleve para comer juntos alguno de sus platos favoritos de la infancia.
Devanaos los sesos todos juntos para ver si se os ocurre algo con lo que todos puedan emocionarse. Le dará a todo tu equipo algo que esperar con asiduidad.
Respalda el aprendizaje, el desarrollo profesional y la productividad
6. Cambia de director para las reuniones de equipo
Los empleados que se sienten incluidos tienen una probabilidad un 50 % menor de dejar sus trabajos. Por lo tanto, una forma de no pasar a formar parte de esta estadística consiste en cambiar las cosas. Crea un horario rotativo en el que cada vez sea alguien distinto quien dirija la reunión semanal o mensual del equipo.
La persona designada puede colaborar con otros miembros del equipo para recopilar feedback, identificar temas de debate y elaborar el orden del día. Ahora bien, en última instancia, esta persona será la responsable de dirigirlo todo.
Esta estrategia les da a todos (incluso a quienes no tienen tanta inclinación a hablar en voz alta) la oportunidad de participar y de que se les escuche.
7. Elabora un programa de formación
Cuando intentas aumentar la implicación, no puedes subestimar el poder del aprendizaje y el desarrollo. Según el informe de 2019 sobre la formación de los trabajadores elaborado por LinkedIn (el 2019 Workforce Learning Report), el 94 % de los empleados afirman que se quedarían en una empresa más tiempo si simplemente esta invirtiera en ayudarles a aprender.
Para tal fin, puedes llevar a cabo mil actividades distintas como, por ejemplo, las siguientes:
- Organizar un club de lectura
- Planificar con regularidad lunch and learns, es decir, sesiones de formación con comida incluida a la hora del almuerzo
- Iniciar un programa de formación formal
- Ofrecer acceso a cursos en línea
- Ofrecer un programa de reembolso de la matrícula u otros gastos educativos
- Posibilitar la rotación de puestos de trabajo para que los empleados puedan aprender otros aspectos de la empresa
- Montar un espectáculo mensual en el que los empleados puedan compartir sus talentos o pasiones
Ponte en modo creativo y recuerda pedirles la opinión a tus empleados sobre lo que les gustaría. De este modo, podrás estructurar con mayor facilidad programas de formación que satisfagan de verdad sus necesidades.
El 40 % de los empleados afirma que el reconocimiento no es una prioridad en su actual empresa.
8. Monta un hackatón
Cuando hay tantas cosas de las que ocuparse a diario, no queda mucho tiempo para la innovación, lo que significa que los empleados dedican mucho más tiempo a hacer tareas rutinarias que a entrenar sus músculos creativos.
Un hackatón es un día designado (puede ser trimestral, semestral, etc.) en el que todos dejan a un lado su trabajo habitual para dedicar tiempo a la idea o al proyecto que se les ocurra. Aquí en Atlassian, lo llamamos ShipIt.
El personal puede trabajar en solitario o por equipos, y puedes decidir si los proyectos finalizados tendrán que beneficiar a la empresa o no. Al final de la jornada, todos presentarán lo que hayan creado.
El hackatón se ha vuelto cada vez más popular en Silicon Valley, ya que le da a todo el mundo un tiempo fijo para dar vida a ideas que, de otro modo, se habrían abandonado.
9. Inicia un periodo sin reuniones
10. Ofrece oportunidades para la colaboración interdisciplinar
Muchos trabajadores ignoran la repercusión de su trabajo sobre la cuenta de resultados de la empresa, y el 39 % de los empleados encuestados afirmaron que solo a veces entienden cuál es su contribución. Por desgracia, el 9 % rara vez la entiende, y el 5 % no lo hace nunca.
Si van tan perdidos sobre la importancia de sus propias funciones, imagínate lo poco que sabrán del resto de los cargos y departamentos.
Ataja este problema ofreciendo oportunidades para aumentar la colaboración interdisciplinar como, por ejemplo, mediante un proyecto compartido, un sistema de amigos, un programa de seguimiento profesional o presentaciones periódicas de otros departamentos.
Los miembros de tu equipo verán un contexto más amplio sobre la interrelación de todas las partes. Además, de propina, en tu equipo podrán atisbar otras trayectorias profesionales y movimientos laterales que podrían hacer.
Demuéstrales que les escuchas
11. Envía una encuesta
La implicación no se reduce a actividades divertidas y reuniones. También es importante ser un buen empleador y escuchar activamente las necesidades y los deseos de tus empleados.
Por desgracia, son demasiadas las empresas que no dan la talla en este aspecto, ya que el 34 % de los empleados de todo el mundo afirman que su empresa no escucha sus ideas para mejorar el negocio.
Si ya ha pasado un tiempo desde la última vez que pediste impresiones a tu equipo, envía una encuesta (el que sea anónima o no ya depende de ti) para recabar un feedback sincero. Puedes plantear preguntas como las siguientes:
- ¿Podrías mencionar algo que te enorgullezca mucho de tu cargo actual o de nuestro equipo?
- ¿Cuál es una de tus mayores frustraciones sobre tu cargo actual o nuestro equipo?
- ¿Podrías mencionar algo que haría que tu vida laboral fuera considerablemente más sencilla?
Prestarles atención te diferenciará de la gran mayoría de los empleadores. Menos de la mitad (el 47 %) de los empleados encuestados afirmó que sus empleadores piden asiduamente a los empleados que aporten ideas y el porcentaje de los que dijeron que la organización aplica cambios a partir de ese feedback es todavía menor (el 37 %).
12. Implanta un horario de atención
Otra forma sencilla y eficaz de demostrar a tu equipo tu disposición a escucharles y que valoras sus aportaciones es implantar un horario fijo de atención.
Esta franja horaria predecible le aporta a tu equipo la oportunidad de acudir a ti a hacerte preguntas, plantearte retos, ofrecerte feedback y mucho más, sin sentir que interrumpen o te están robando una porción excesiva de tu precioso tiempo.
El 34 % de los empleados de todo el mundo afirman que su empresa no escucha sus ideas.
Dales un poco de amor
13. Hazles un cumplido
Triste pero cierto: el 40 % de los empleados aseveran que el reconocimiento no es una prioridad en su actual empresa, lo que significa que están constantemente trabajando a destajo sin recibir ningún tipo de agradecimiento ni alabanza, lo cual puede desmotivarles y frustrarles.
Aplaude a tu equipo (puntos extra si les llevas magdalenas o les invitas a un delicioso almuerzo) por el magnífico trabajo que hicieron en tal o cual proyecto. Otra opción es darle las gracias a alguno de los miembros de tu equipo por su reciente aportación en una reunión de equipo.
Se trata de un pequeño cambio que requiere muy poco esfuerzo, pero ayuda muchísimo a mejorar los niveles de implicación de tus empleados.
14. Desarrolla un programa de reconocimiento
El reconocimiento por parte de la gerencia es importante para tus empleados, pero el reconocimiento entre colegas también tiene mucho peso: constituye el 22 % de todo el reconocimiento relevante para los empleados.
Sin embargo, no es algo que se produzca de forma espontánea, sino que tienes que proporcionarles a los miembros del equipo las herramientas, los recursos y el estímulo necesarios para ayudarles a darse palmaditas en la espalda mutuamente.
Existen una serie de bots y herramientas que puedes instalar en Slack (consulta Kudos o Praisely) para ofrecer elogios. O, si lo prefieres, puedes simplificarlo todo empezando todas las reuniones de tu equipo con felicitaciones públicas, en las que los miembros del equipo puedan alabar o agradecer al resto de los miembros del equipo por su ayuda, sus aportaciones o grandes victorias. Aquí en Atlassian, usamos Kudos para recompensar y reconocer los méritos de los miembros del equipo con pequeños premios (como, por ejemplo, una tarjeta regalo de Amazon o entradas para el cine).
Vas por el buen camino para implicar más a tu equipo
Por si el equipo A y el equipo B de la introducción aún no te lo habían dejado lo bastante claro, la implicación es una pieza esencial del rompecabezas que supone dirigir un equipo de forma que sea productivo y esté satisfecho.
Sin embargo, la implicación de los empleados no es algo que vaya a suceder de la noche a la mañana. Fomentar y mantener altos niveles de implicación te obligará a adoptar una estrategia más general, y tal vez incluso a efectuar unos cuantos ajustes en toda tu cultura empresarial.
Ahora bien, como sucede con cualquier otra cosa, no tiene nada de malo empezar poco a poco y anotarte unas cuantas victorias rápidas. Si implantas algunas de las actividades de implicación de los empleados que hemos destacado aquí, observarás un repunte inmediato dentro de tu propio equipo.