La presentación de una propuesta de negocio es un resumen conciso de lo que vas a presentar. Proporciona información sobre tu empresa o proyecto y su encaje en tu plan estratégico. 

La introducción es un lugar excelente para incluir tus declaraciones de objetivos y principios para que el público comprenda cómo percibes tu trabajo. Abstente de dar demasiados detalles: podrás hacerlo en las secciones posteriores.

Explica claramente el problema o el reto que tu propuesta pretende abordar. Por ejemplo, una solución para un comercio minorista podría abordar las malas valoraciones de la experiencia de usuario que los clientes dan sobre las máquinas de autopago.

La solución es donde puedes brillar de verdad. Tu público ya conoce el problema, así que debes incluir información detallada sobre lo que hace tu solución, su funcionamiento, sus ventajas y su viabilidad general. También puedes incluir la experiencia y las cualificaciones exclusivas de tu empresa o equipo para solucionar el problema.

Un plan de implementación demuestra tu preparación. Detalla los pasos para implementar la solución que propones, incluidos el cronograma y la estrategia de gestión del proyecto. Indica aquí los hitos importantes para ayudar a tu público a visualizar el plan lineal del proyecto.

Tanto si vas a presentárselo a la directiva o a un cliente, debes incluir el coste estimado del proyecto. Desglosa los costes financieros con las estimaciones presupuestarias y los requisitos de recursos. Si es posible, plantéate darle al destinatario opciones como, por ejemplo, el coste de ofrecer una solución buena, una mejor y la óptima, con detalles de lo que proporciona cada desglose de los costes.

No te olvides de pedirle a tu público que haga lo que deseas. Puede tratarse de la aprobación de un proyecto, una colaboración o una solicitud para hacer negocios juntos. En el caso de proyectos e implementaciones más complejos, puedes incluir la colaboración en un marco de planificación estratégica o en el establecimiento de objetivos. Mantén la conversación abierta a oportunidades futuras.

Ask your audience to take the desired action. That may be project approval, collaboration, or a request to do business together. For more complex projects and implementations, you might include collaborating on a strategic planning framework or setting goals. 

Keep the conversation open for future opportunities. Emphasize how your proposal aligns with their long-term success by addressing their needs and demonstrating how your solutions contribute to enduring outcomes.

Once the proposal is complete, it’s essential to review and finalize it before submitting it to the client. This includes:

1. Proofread for grammar and spelling errors: Ensure that the proposal is free of any grammatical or spelling mistakes. Errors can undermine your professionalism and credibility.

2. Ensure all necessary information is included: Double-check that all required sections and details are present. Missing information can lead to misunderstandings and weaken your proposal.

3. Review the proposal for clarity and concision: Ensure that the proposal is clear and concise. Avoid unnecessary jargon and make your points easy to understand.

4. Make final revisions or edits: Make any necessary adjustments to improve the proposal’s overall quality. This may include refining the language, enhancing the design, or adding additional supporting information.

After the proposal is submitted, it’s essential to follow up with the client to discuss the next steps. This may include:

1. Schedule a meeting or call to discuss the proposal: Arrange a time to go over the proposal in detail, answer any questions, and address any client's concerns.

2. Answer any questions the client may have: Be prepared to provide additional information or clarify any aspect of the proposal. This helps build trust and demonstrates your commitment to meeting the client’s needs.

3. Provide additional information or clarification: If the client requests more detail or has specific questions, respond promptly and thoroughly. This shows your responsiveness and willingness to collaborate.

4. Negotiate the terms of the agreement: Be open to discussing and negotiating the terms of the proposal to reach a mutually beneficial agreement. Flexibility and a willingness to find common ground can help secure the deal.

By following these steps and including the necessary components, you can create a comprehensive and compelling business proposal that helps you win new business and stand out from the competition.